(L322) El testimonio de Yarfoz (1986)
Rafael Sánchez
Ferlosio, El testimonio de Yarfoz (1986)
Os traigo hoy una
novela mitológica de Rafael Sánchez Ferlosio (Roma, 1927). Uno de los
últimos escritores de raza todavía vivos. Se trata de El testimonio de Yarfoz (1986).
Argumento: El hidráulico Yarfoz entra al servicio
del noble Nébride, nieto del príncipe Arriasco en la ciudad palatina. Yarfoz
procede de Escascésima. Nébride pretende desecar unas tierras en los almarjales
del río Dul donde quiere experimentar unos nuevos cultivos. Nébride pide a
Yarfoz que se instale en su casa y le ayude en la monumental tarea. También
solicita a su abuelo Arriasco que interceda ante los Ordimbodrios para que
apoyen el proyecto y se haga acompañar del famoso hidráulico Estrategio.
Se nos presenta el
mapa de los territorios, que me recuerdan a la Cimeria de Conan el Bárbaro, con
sus pueblos, sus ríos y las cotas de las alturas. Las medidas son en mantas
cuadradas y las distancias se miden en cuerpos de caballos. Las leyes en Fueros
del derecho más antiguo y Fueros del derecho mayor. Las alturas en estaturas y
la moneda es la Sarta de metal precioso. Se rigen por la proporcionalidad entre
gasto y beneficio.
La desecación de
esas tierras va a perjudicar a los pueblos de Múriga y Úriga dejando sin agua y
sin funcionar una fabulosa rueda de regar. Sin embargo los habitantes de
Ordimbrod están a favor de la desecación porque les favorece. Se inicia un
litigio entre las dos partes, pero como las aldeas forman parte de la ciudad de
Ordimbrod piensan formar una Comunidad Pública de Regantes para reunir las
condiciones y poder litigar con la ciudad.
A la muerte de
Arriasco sus dos hijos gemelos, Caserres y Obnelobio, aclamados y enardecidos
por sus seguidores emprenden una acción punitiva contra los Atánidas. En esta
acción matan al príncipe Espel. Nébride, consternado por la acción de su tío y
su padre, decide abandonar la tierra de los Grágidos para siempre e iniciar su
peregrinaje acompañado de su familia y sus más fieles por el resto de las
tierras del cauce del bajo Barcial topándose con los pueblos de los Iscobascos,
especialistas en el trabajo de la madera, y asentándose finalmente en la ciudad
de Gromba Feceria.
Comentario: Sánchez Ferlosio es un autor capaz de
inventar civilizaciones desconocidas, realidades ajenas pero redondas y
verosímiles, Esta novela fantástica es de lo mejor de Ferlosio aunque termina
de sopetón (cuentan que el editor le arrancó casi a la fuerza un fragmento de
una obra mucho más larga e inacabada), tiene todo el brío intelectual, toda su
capacidad de constructor de sociedades, pero además posee una grandeza épica
incomparable. Escritores demiurgos, hacedores de mundos como dice Rosa Montero.1
Aunque seguramente no sea apta para todos lectores, tal vez a algunos les resulte
aburrida.
Dos libros más de Sánchez
Ferlosio que os recomiendo: Industrias y
andanzas de Alfanhuí (1951) y El
Jarama (1955).
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